Quiniela jornada 26

Situación límite para el Manchester United. Sus cuatro puntos, conquistados tras una victoria, un empate y tres derrotas, le han colocado como colista del Grupo A. Ahora necesita una carambola para estar en la siguiente fase. En primer lugar, debe ganar, sí o sí, este encuentro. Y después deberá esperar que Copenhague y Galatasaray empaten en el Parken Stadium, con la segunda plaza en juego, que les obliga a ganar a los dos. Para el Bayern, premios económicos al margen por sumar puntos, no hay nada deportivo en juego. Su liderato no se lo puede quitar nadie y acude a este partido como juez de paz. Pero seguro que los alemanes serán competitivos.

Dramático y decisivo partido en el Stade Bollaert-Delelis de Lens, entre dos equipos que no se juegan entrar en octavos de final de la Champions, sino poder seguir compitiendo en la Europa League. Al conjunto local, que solo ha ganado un partido en esta fase de grupos y que viene de encajar un 6-0 en el Emirates, le vale sumar un punto para conseguir el objetivo. El Sevilla, que aún no conoce esta temporada lo que es ganar a nivel continental, tan solo le sirve la victoria. No hay que hacer ningún tipo de cábalas. Derrota o empate, para casa con la cabeza baja. La victoria, supone la vuelta a la competición fetiche para los hispalenses, que deberán apelar otra vez a la épica.

En el Grupo B solo hay emoción en los puestos de cola en esta última jornada. El PSV, al que la victoria se le resistió en los tres partidos iniciales, sumó seis puntos en las dos siguientes, colocándose con ocho, que ya le otorgan la segunda plaza. Está a tres por encima del Lens, pero le gana el ´average´ y también la diferencia de goles. Intentará resarcirse de la única derrota sufrida por ahora, que precisamente fue ante el Arsenal en el Emirates, por un contundente 4-0. Los ingleses llegan al Philips Stadion con el pase a octavos sellado y como líderes, lo que en principio es beneficioso de cara al próximo sorteo. Arteta hará rotaciones con lo cargado que tiene el calendario.

En teoría, el Nápoles está en octavos. Es segundo del Grupo C, con siete puntos, a tres de su inmediato perseguidor, que va a ser su próximo rival. Juega ante su público y le basta el empate, e incluso si pierde por un gol de diferencia, ya que ganó en Portugal su primer encuentro. Pero con la irregularidad del equipo dirigido por el veterano Walter Mazzarri, y algunos resultados preocupantes en este último mes, hay que hacer números porque el pescado aún no está vendido. Si el Braga es capaz de asaltar el ´Diego Armando Maradona´ venciendo por dos goles de ventaja, igualaría a puntos a su rival, le ganaría en el ´goal average´ y le superaría en diferencia de goles.

Encuentro en el que solo uno de los dos equipos se juega algo. El Unión Berlín, en su debut ante los ´grandes´, ha pasado con más pena que gloria. En las tres primeras jornadas perdió y en las dos siguientes ha sumado dos empates en Nápoles y Braga. Si es capaz de ganar este próximo martes, sumaría cinco puntos y debería esperar la derrota del Braga para estar en la Europa League. Una carambola muy complicada, pero matemáticamente posible. Para el Real Madrid, primero de grupo, pase lo que pase, está en juego conseguir un pleno de victorias, seis de seis, al margen de sumar los ingresos que paga la UEFA por triunfo conseguido.

Con ambos equipos ya clasificados para octavos, en juego está la primera plaza del grupo D. Los dos conjuntos afrontan el choque con 11 puntos. A la Real le vale el empate para acabar como líder. El Inter llega al duelo como líder de la Serie A tras dos triunfos seguidos muy convincentes: 0-3 al Nápoles y 4-0 al Udinese. En la última jornada de esta Champions empató a tres en Lisboa contra el Benfica. La Real Sociedad viene de obtener un buen triunfo en Villarreal en Liga (0-3 con tres goles en el tramo final del primer tiempo) para confirmarse en zona europea. El reto del Giuseppe Meazza es mayúsculo para los de Imanol Alguacil, que empataron sin goles en casa ante el Salzburg en la jornada anterior. En el Reale Arena hubo tablas (1-1) entre la Real y el Inter.

Es el otro partido del grupo de la Real Sociedad. En juego está poder disputar la Europa League. El Salzburg tiene la paella por el mango, pues le saca tres puntos al Benfica. El conjunto austriaco empató sin goles en el Reale Arena en la jornada anterior y lleva un balance de un triunfo, una X y tres derrotas. Le valen las tablas tras el 0-2 que obtuvo en Lisboa en el duelo de la primera vuelta. En su país es líder y viene de vencer al Rapid de Viena por 0-1. El Benfica debe ganar sí o sí y hacerlo por más de dos goles. Por ahora no ha vencido en esta Champions: un empate y cuatro derrotas. En la pasada jornada tuvo contra las cuerdas al Inter, al que dominaba por 3-0 para un 3-3 final. El cuadro luso viene de dos empates seguidos en la Liga portuguesa, donde va tercero a un punto de los colíderes Sporting y Porto.

El Atlético quiere hacer valer la fortaleza en el Cívitas Metropolitano para ratificarse en la primera posición del grupo E. Le vale el empate. El pleno de victorias que lleva hasta el momento ante su público el equipo de Simeone este curso parece una garantía de éxito. En esta Champions ya doblegó al Feyenoord (3-2) y al Celtic (6-0) como local. El Lazio, que tiene asegurado el pase como segundo, debe ganar para intentar ser primero. Fuera de casa ganó en Glasgow (1-2) y cayó en Rotterdam (3-1). El cuadro italiano viene de empatar en Verona (1-1) en la Serie A, donde va noveno, a dos puntos de la zona europea. En Roma hubo tablas (1-1) entre Lazio y Atlético.

Duelo intranscendente deportivamente hablando. El Celtic ya está eliminado y el Feyenoord será tercero pase lo que pase e irá a la Europa League. El equipo escocés, líder en su país, no conoce la victoria en sus últimos 15 partidos de la fase de grupos de la Champions League (tres empates y 12 derrotas), desde la victoria por 0-3 a domicilio ante el Anderlecht en septiembre de 2017. El Feyenoord peleó para meterse en octavos hasta caer en los dos últimos encuentros de esta fase de grupos: 1-0 ante la Lazio y 1-3 contra el Atlético. Viene de doblegar (3-1) al Volendam en la Eredivisie, donde va segundo.

Partido del grupo de la muerte. El Dortmund, que viene de perder (2-3 contra el RB Leipzig) en la Bundesliga, donde va quinto, ya está clasificado para los octavos de final de la máxima competición continental tras haber sumado 10 puntos de 15 posibles, con tres victorias seguidas que han sido claves para los amarillos: 0-1 y 2-0 al Newcastle y 1-3 al Milan. Eso sí, se juega pasar como primero. Solo cederá el liderato si cae en este partido. Y es que el PSG, líder en Francia, sabe que será puntero definitivo si es capaz de vencer en el Signal Iduna Park. El equipo de Luis Enrique salvó los muebles en la pasada jornada (1-1) en casa ante el Newcastle empatando en el minuto 98 con un penalti muy discutible convertido por Mbappé. En París, el cuadro galo se impuso al Dortmund por 2-0. El PSG, aunque opte al liderato, también puede quedar fuera de la Champions.

Duelo entre dos equipos que sueñan con octavos, aunque no dependen de si mismos. Para ello necesitan que el PSG pierda, pero ellos deben ganar. El empate no les vale para seguir en la Champions, aunque el mejor entre ellos accederá a la Europa League. Y curiosamente, por los criterios de desempate, otro empate entre ellos (sellaron un 0-0 en Milan) puede tener distinto triunfador, ya que, si es con goles, sería el cuadro italiano el que sería tercero. Si es otro sin goles, el Newcastle quedaría por delante de su rival. Un equipo irregular que anda tercero en la Serie A y que a domicilio ha sumado un punto de seis. El once inglés, aquí goleó al PSG, pero cayó con el Dortmund. Por lo que se juegan, todo el posible.

La última derrota del Oporto en feudo del Barça le obliga a puntuar aquí para asegurarse un puesto en octavos. El Shakhtar, sin hacer ruido, ha conseguido sumar también nueve puntos y llega sin presión a un duelo donde la calidad y la experiencia hacen favorito al cuadro portugués. Y más, valiéndole el empate, ya que se impuso en cancha del cuadro ucraniano, que juega en Hamburgo por la guerra que afecta a su país. Quizás por ello, su clasificación sería casi un hito, aunque para ello debe arriesgar para ganar, pues sólo le vale la victoria a un plantel plagado de juventud que ya fue capaz, en casa, de derrotar al Barcelona. A domicilio, no obstante, le cuesta imponerse, aunque ha ganado dos de sus últimas cinco salidas. Entre ellas, dos derrotas, pero ambas por la mínima en el Bernabéu y en Montjuic.

El Betis se la juega en esta última jornada de grupos de la Europa League. Eso sí, depende de si mismo y el empate le vale para clasificarse. Y, además, juega en el Villamarín, donde ha ganado sus dos partidos y se siente fuerte, pues ha perdido las dos salidas ante los dos rivales con los que se disputan las dos primeras plazas. El Sparta y el Rangers, que debe puntuar o esperar el tropiezo del conjunto checo para acceder a las eliminatorias. El premio menor, pasar a la Conference, donde posiblemente tenga más opciones de llegar lejos. No obstante, para Pellegrini el problema son las bajas, la última la de Guido Rodríguez. Y es que a pesar que no rehúye las rotaciones, con menos jugadores disponible la carga de minutos puede afectar a un once que vendrá de jugar en este mismo escenario contra el Madrid.

Choque que cierra el grupo F y, para el Villarreal, una oportunidad de seguir creciendo. Teniendo el billete asegurado para la siguiente fase, esta visita es un reto para un club que ha vivido convulsionado hasta la llegada de Marcelino. Es el tercer técnico del curso y parece que ha surtido efecto. El equipo consigue resultados y transmite buenas sensaciones competitivas, y la visita al Rennes, líder con dos puntos más que el Villarreal, es una gran piedra de toque para medir nivel y expectativas. En la Cerámica, aún con Pacheta, ya ganó el cuadro español, pero el once francés chutó el doble de veces y pudo empatar perfectamente. Ahora, sin presiones añadidas y en crecimiento, las fuerzas se igualan.