Quiniela jornada 21

Todo queda por decidir en la lucha por las dos primeras plazas del Grupo H. El Ernst Happel Stadion será el escenario donde se determine quién accede a la fase final del Mundial y quién deberá jugar la repesca. En principio, Austria lo tiene todo a favor: es líder con dos puntos de ventaja sobre su perseguidor y le basta un empate para lograr su objetivo. Además, cuenta con el factor campo, decisivo hasta ahora, pues ha ganado los tres partidos disputados ante su afición, con trece goles a favor y uno en contra. Bosnia-Herzegovina, dirigida por Sergej Barbarez, está obligada a ganar; el empate no le sirve. A su favor, no ha perdido fuera de casa.

Bélgica llega a la última jornada del Grupo J con la situación controlada, pero sin margen para despistes. Macedonia del Norte, con dos puntos menos, está al acecho. El empate ante Kazajistán agitó la clasificación y obliga a puntuar ante una Liechtenstein hundida en la tabla, sin puntos ni goles y con veintitrés tantos encajados. En casa, los de Rudi García se han mostrado sólidos: tres victorias, un empate y una pegada demoledora que intimida. El contraste es brutal: Liechtenstein acumula derrotas lejos de su feudo y una sangría defensiva sin freno. El precedente habla solo: 0-6 en la ida, aviso claro de la diferencia entre ambos.

Bielorrusia y Grecia bajan el telón del Grupo C en un choque sin más premio que el orgullo. Los locales, hundidos en la tabla sin un solo punto, llegan golpeados: pleno de derrotas, apenas tres goles a favor y quince en contra, y un papel desastroso en casa, donde no han logrado inquietar a nadie. Los helenos tampoco pueden presumir. Terceros con seis puntos, mezcla dos victorias y cuatro derrotas, siete tantos marcados y diez encajados, y solo han celebrado un triunfo lejos de su feudo. Sin presión clasificatoria, ambos buscan una última alegría para no despedirse con el mismo sabor amargo.

Bulgaria y Georgia cierran un Grupo E dominado por España y Turquía, en el que no han tenido ni la más mínima opción desde el primer momento. El papel de los locales, últimos sin puntuar, ha sido algo más que decepcionante, con pleno de derrotas, un gol a favor y dieciocho en contra. La selección dirigida por Alexander Dimitrov busca para mitigar este mal sueño un triunfo de restañe algunas heridas. El papel del combinado de Willy Sagnol no es tan nefasto, pero solo ha sido ha ganado un encuentro de cinco posibles, precisamente ante su próximo rival. Se esperaba bastante más de los caucásicos.

Hampden Park vibrará este martes en un partido que va a decidir una plaza directa para la fase final. Está en juego el liderato definitivo del Grupo C. Escocia recibe a Dinamarca con un punto de desventaja, pero con el empuje de cincuenta y dos mil espectadores espera conseguir los tres puntos que necesita para volver a estar en un certamen en el que no participa desde 1998. Los dos encuentros que el combinado de Steve Clarke ha disputado en casa los ha ganado, de la misma manera lo han hecho los hombres de Brian Riemer en sus dos desplazamientos. El equipo nórdico llega a esta cita imbatido y tiene suficiente con un empate.

Duelo directo por la segunda plaza, que da derecho a la repesca, en el grupo J europeo de clasificación para el Mundial del próximo verano. Ambas selecciones llevan 13 puntos. Gales afronta el duelo tras ganar por un raquítico 0-1 a Liechtenstein, la peor selección del grupo. En casa perdió (2-4) ante la puntera Bélgica en el último compromiso que ha disputado, pero ganó los dos primeros: 3-1 a Kazajistán y 3-0 a Liechtenstein. Macedonia del Norte viene de dos empates seguidos, 1-1 como local contra Kazajistán y 0-0 en Bélgica. Los macedonios no conocen la derrota en toda la fase (tres triunfos y cuatro empates). En la primera vuelta huno tablas en el Toše Proeski Arena de Skopie (1-1).

Cara a cara, las dos mejores selecciones del grupo B europeo de clasificación para el próximo Mundial. Kosovo tiene asegurada la presencia en la repesca como segunda clasificada y necesita ganar por seis goles o más a los helvéticos para acabar primera, una empresa muy complicada. Los kosovares vienen de dos triunfos en línea a domicilio: 0-2 en Eslovenia y 0-1 en Suecia. Suiza quiere rematar el pase al Campeonato del Mundo. Por ahora, no ha perdido en toda la fase (cuatro victorias y un empate). En el Sankt Jakob-Park de Basilea, los suizos le endosaron un 4-0 a Kosovo el pasado 5 de septiembre en la primera vuelta.

Duelo intranscendente en el grupo H europeo de clasificación para el Mundial 2026. Rumanía, tercera, ya no puede ni asaltar la segunda plaza, que lleva a la repesca. Viene de quedarse sin opciones al caer este sábado por 3-1 contra Bosia y Herzegovina en el Stadion Bilino Polje de Zenica. La débil San Marino cierra la tabla com cero puntos y un bagaje de un solo gol a favor y hasta 32 en contra. En la primera vuelta los rumanos ya mostraron su superioridad con un triunfo holgado por 1-5.

Duelo sin trascendencia deportiva en el grupo B europeo rumbo al próximo Mundial. Suecia ha completado una fase muy pobre y apenas ha sido capaz de sumar un punto, precisamente, en la visita a Eslovenia (2-2). Ni siquiera el debut en el banquillo de Graham Potter sirvió de revulsivo: los suecos cayeron este sábado por 4-1 y encadenaron la cuarta derrota consecutiva. Eslovenia, con tres puntos fruto de tres empates, tampoco ha logrado despegar. Llega a la cita tras perder 0-2 frente a Kosovo y con una amenaza clara: si vuelve a caer, cerrará el grupo como colista.

Clásico centroamericano rumbo al Mundial 2026 en el grupo C de la Concacaf. Costa Rica, tercera, se la juega tras perder por 1-0 en Haití. Su técnico, Miguel Herrera, está en la cornisa. Los ticos llevan seis puntos, dos menos que los haitianos y que los hondureños. Así pues, están obligados a vencer. Honduras quiere certificar el pase a la Copa del Mundo. Lidera la tabla, pero viene de perder por 2-0 contra Nicaragua. El 10 de octubre, hondureños y costarricenses empataron sin goles.

Guatemala se quedó sin opciones de mundial en un duelo vibrante contra Panamá, que se impuso 2-3 en una fecha que cambió de sede por la posibilidad de incidentes que finalmente no se produjeron. Esa derrota, también inmerecida, permite a Surinam estar cerca de hacer historia. Con la goleada sobre El Salvador en casa, viaja imbatido a esta última jornada del grupo A de clasificación en la Concacaf, sabiendo que depende de si mismo. Para ello, debe igualar el resultado de Panamá y mantener margen de goles a su favor en el diferencial general, que es el criterio de desempate definitivo.

Un encuentro que podría tener doble premio, pues ambos pueden acceder al mundial. Sin embargo, para no depender de otros, el que obtenga el primer puesto tiene billete asegurado. A Jamaica, no obstante, solo le vale la victoria tras empatar la pasada jornada en Trinidad y Tobago. Eso le permitió a Curazao alcanzar el liderato después de golear en Bermudas. Un claro 0-7 que le mantiene imbatido, con triunfo incluido en su país sobre el once jamaicano, que como local ha ganado los dos encuentros disputados. Si se puede, duelo para cubrirse.

Panamá firmó un triunfo vibrante en su visita a Guatemala en la pasada quinta jornada en la clasificación de la zona Concacaf. Un 2-3 final, con alternativas e intercambio de golpes que le favoreció, certificando tres puntos que le aseguran terminar entre los dos primeros de este grupo A. Sin embargo, solo el liderato da billete directo para el mundial, así que debe ganar a El Salvador y esperar el tropiezo de Surinam, que goleó precisamente al cuadro visitante, que con la goleada recibida se quedó sin opciones de acceder a la gran cita de selecciones.

Tras los resultados de la quinta jornada de la pasada semana, este partido ya no tiene nada en juego. Dependía de Trinidad y Tobago, que todavía albergaba opciones, pero el empate en casa contra Jamaica no fue suficiente. En parte, por la goleada encajada por Islas Bermudas a manos de Curazao, que la goleó por 0-7 y dejó en evidencia un plantel que en fechas anteriores había dejado destellos de competir y puntuar. Cierto que el partido, ya sin nada en juego, se puede abrir a la sorpresa, pero los locales, con una sola derrota en cinco encuentros, parte favorito.