CAZAR GAMUSINOS

¿Quién dice que los Gamusinos no existen? Yo los he visto. Uno se me escapó vivo en Mallorca en los albores de este siglo. Un pleno al quince único, cuando todavía estaban vigentes las pesetas y las cifras tenían muchos ceros. El último se me escapó hace menos de un año en Granada. Era mucho mas pequeñito, pero quien ha probado sus carnes sabe de lo exquisito de su sabor y del buen regusto que deja. Antiguamente, los cazaba con arco y flechas. Hoy en día, existen armas muy poderosas. Hablo de programas informáticos. No cazaremos con dobles y triples a pelo. Tampoco se usarán las ya viejas reducidas. Usaremos porcentajes a los partidos, abarcando todos o casi todos los resultados. Se empleará el concepto de Esperanza Matemática, que relaciona la probabilidad de que algo suceda con su rentabilidad. Se tendrán en cuenta los porcentajes apostados por los demás quinielistas (datos del LAE) y se confrontaran con los porcentajes que ofrecen las casas de apuestas. Se empezará con una amplia quiniela madre a la que se le pasarán las poderosas armas que disponemos; Coeficiente de rentabilidad, Tramificador, Distancias, Diferencias Progresivas.....lo que haga falta para meter al Gamusino en el saco. Nos posicionaremos en el lugar idóneo para cada jornada esperando a que la presa pase por allí. Ahí es donde interviene mi instinto de cazador. Habrá semanas que interese estar agrupado, en otras la estrategia será estar dispersado. Eso es pronóstico. Y suerte, necesitaremos mucha suerte. No os voy a engañar. Hay quien sale a por Gamusinos todos los fines de semana y nunca los ha visto, ni de lejos. Hay quien los ha tenido entre las manos y se les ha escapado en el último minuto. Se que los comienzos son duros y que los socios quieren objetivos a corto plazo. Así que empezaré centrando mi objetivo en rentabilizar las máximas jornadas posibles, lo que implica que se arriesgará un poco menos. Peña SIN COMISIÓN